En la Argentina existen distintas especies que pueden producir complicaciones al momento de picar o morder e inocular el veneno. La Dra. Verónica Torres Cerino, del Hospital Universitario Austral, explica qué hacer frente a un accidente con una araña o serpiente.

El verano es el momento ideal para que arañas y serpientes salgan de sus lugares de resguardo y, si son venenosas, el ataque puede ser mortal si la persona no acude rápidamente a la guardia. Dentro del grupo conocido como animales ponzoñosos, existen tres clases de cada uno que revisten peligrosidad y es necesario conocer los síntomas para poder actuar de forma urgente.

La Dra. Verónica Torres Cerino, Jefa del Servicio de Toxicología y Medio Ambiente del Servicio de Emergencias del Hospital Universitario Austral, explicó que, ante un ataque, “lo importante es siempre consultar de manera inmediata, no hacer torniquetes, ni cortes ni succionar la herida, solo lavarla con agua y jabón si es posible y acerarse al hospital rápidamente”.

En la Argentina existen tres tipos de serpientes y arañas que revisten peligrosidad. En el primer grupo están:

• La Yarará: genera una lesión muy visible, dolorosa, con hinchazón que asciende por el miembro afectado. Además, altera la coagulación generando sangrados, disminuye la presión sanguínea y genera falla de los órganos.
• La Cascabel: trae daño a nivel muscular y neurológico, falla renal por la alteración muscular y paro respiratorio.
• La Coral: es la más peligrosa, debido a que es neurotóxica y provoca parálisis de los músculos que generan paro respiratorio.

En el segundo grupo, se destacan:

• La Phoneutria o araña bananera: genera hinchazón, dolor y es neurotóxica. Genera daño principalmente en niños y ancianos.
• La Viuda negra: provoca dolor, sudoración y síntomas neurológicos varios
• La Loxoceles: genera una placa en piel muy visible que puede llegar a la necrosis. Si progresa a un cuadro general, trae trastornos renales y shock.

La especialista detalló que “todas las especies pueden ser mortales sin tratamiento”. Y agregó: “Los síntomas pueden ser inmediatos, aunque depende del tipo de accidentes y pueden tardar unas horas en aparecer. Por eso hay que consultar rápido y quedar en observación algunas horas”.