“Injuria renal aguda ó IRA es el deterioro brusco de la función renal que se refleja en los exámenes de laboratorio por un aumento de las cifras de creatinina en plasma. Esta patología no da síntomas hasta alcanzar un severo deterioro de la función renal que requiere diálisis. La IRA es una causa importante de mortalidad y morbilidad en todo el mundo. Está asociada a una carga socioeconómica significativa que cada vez más se reconoce como potencialmente modificable, dado que esta condición se puede evitar y/o tratar en una gran cantidad de casos”, explicó el Dr. Guillermo Fragale, Jefe del Servicio de Nefrología y Trasplante renal del Hospital Universitario Austral (HUA).
Así, la Sociedad Internacional de Nefrología desarrolló la iniciativa 0 by 25, que tiene como objetivo “eliminar las muertes evitables de IRA para el 2025”.
“Una de las primeras tareas para cumplir esta meta es el estudio de observación transversal llamado Global Snapshot on AKI (Acute Kidney Injury), diseñado para describir las tendencias actuales de IRA en todo el mundo. Por eso, durante 4 semanas los pacientes con IRA se registrarán en los centros de atención médica de todo el mundo para analizar la incidencia, los factores de riesgo y los recursos disponibles para el diagnóstico y tratamiento. La meta es identificar tendencias en el riesgo, reconocimiento, incidencia, tratamiento y resultados de la IRA en diferentes entornos de todo el mundo. Finalmente, esta información se utilizará para desarrollar e implementar herramientas y recursos educativos para evitar muertes con miras al 2025”, comentó el especialista.
Cabe destacar que el Hospital Universitario Austral, a través del Servicio de Nefrología y Trasplante renal, participó del estudio observacional notificando casos de IRA que se presentaron en los diferentes sectores del Hospital durante la semana del 20 de octubre de 2014.
Sobre la IRA
Los grupos de riesgo, es decir quienes presentan más posibilidades de desarrollar la enfermedad son las personas mayores de 75 años, diabéticos y quienes tienen enfermedades crónicas del hígado, insuficiencia cardiaca ó insuficiencia renal crónica.
Por otra parte, entre las causas más comunes se encuentran la deshidratación, la hipotensión arterial, la obstrucción de la vía urinaria, las infecciones y el uso de medicamentos tóxicos para el riñón, entre otras. “Las causas son múltiples y los tratamientos difieren según la causa” completó Fragale.