Nuestro país fue el primero de Latinoamérica en reconocer la necesidad de contar con esta fecha, que finalmente fue instaurada en 1998. A partir de ahí fue emulado por muchos otros, entre los que se encuentran El Salvador, Uruguay, España, México, Austria, Eslovaquia, Chile, Ecuador, Cuba y Filipinas.
El Día Mundial del Niño por Nacer, que se celebra el 25 de marzo, rememora el momento en que el ángel le pregunta a María si quiere ser la madre del Señor. Es decir que hace referencia al momento conocido como “anunciación”.
En nuestro país es una celebración especial, no sólo porque Argentina fue el primero de Latinoamérica en reconocer la necesidad de contar con esta fecha, sino que además fue el primero del mundo en instituirla efectivamente en diciembre de 1998.
Además, durante la víspera del primer festejo, el entonces presidente Carlos Menem instó a todos los presidentes de la región a sumarse a este día tan especial que pretende honrar el mayor de los derechos del hombre, del ser humano: la vida.
De acuerdo con los preceptos de este día, la vida tiene un valor inviolable y una dignidad irrepetible. Es más: sin vida no hay derechos humanos; y sin ellos no hay libertad.
“Un ejemplo clarísimo de la importancia de preservar la dignidad y el valor de la vida humana lo vemos cuando se dan embarazos que cursan con alguna afectación grave del niño en desarrollo como consecuencia de malformaciones que, en algunos casos, son incompatibles con la vida. Estos bebes enfermos tienen la misma dignidad que uno sano y deben recibir todo el cuidado y la atención posible, tanto por parte de los médicos como de sus padres y familia”, refirió el Dr. Ernesto Beruti, jefe del servicio de Obstetricia del Hospital Universitario Austral.
“En algunos casos, continuó, morirán intraútero y en otros podrán vivir unas pocas horas o días para luego morir. Pero son seres humanos iguales a todos, únicos e irrepetibles, con los mismos derechos y aún más por tratarse de niños enfermos”.
En este sentido, el especialista sostuvo que “son admirables esos padres que sabiendo que su hijo no logrará vivir, le brindan todo el amor posible durante el tiempo de vida intrauterina y luego del nacimiento hasta el momento de su muerte”.
Cabe señalar que estas situaciones son comunes en casos de anencefalia y otras malformaciones fetales incompatibles con la vida, que hoy gracias a los avances de la medicina fetal pueden conocerse a poco de iniciarse un embarazo.
“Los médicos debemos acompañar a los padres que viven estas situaciones tan dolorosas y ayudarlos a comprender que su hijo enfermo necesita de ellos de la misma manera que los necesitaría recién nacido sano, o un niño en sus primeros años de vida. El amor de una madre es tan fuerte que sólo ellas pueden entender este increíble sentimiento que no cambia aunque el hijo por nacer esté enfermo”, completó el Dr. Beruti.
Más sobre la fecha
Luego de instaurarse en Argentina, en el año 1999, esta celebración fue acogida legalmente por Guatemala y Costa Rica, mientras que Nicaragua la asumió al año siguiente. Por su parte, en República Dominicana esta fecha fue aprobada a inicios de 2001 y en Perú por ley en 2002.
La fiesta también es celebrada el 25 de marzo en El Salvador, Uruguay, España, Brasil, México, Austria, Eslovaquia, Ecuador, Cuba, Chile y Filipinas.
Entre otras cuestiones, la conmemoración del Día del Niño por Nacer contempla:
*Que se considera de esa forma a todo ser humano desde el momento de la concepción.
*Que ese ser humano goza de todos los derechos establecidos en la Convención sobre los Derechos del Niño y tiene derecho a una protección especial, más que cualquier otra persona, por parte de la familia, el Estado y la sociedad.
*Que el niño por nacer tiene derecho a la vida, a estar sano, a encontrar una familia, a educarse y a desarrollarse en un ambiente favorable.
*Que en todas las decisiones y medidas que tomen o en que intervengan instituciones públicas o privadas, así como órganos legislativos, judiciales o administrativos, es de consideración primordial el interés superior del niño por nacer.
*Dr. Ernesto Beruti
Jefe del servicio de Obstetricia
Hospital Universitario Austral